Agencias. Con el objetivo de reducir las emisiones de metano en bovinos y ovinos, contemplando además características productivas y reproductivas, el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria (INIA) de Uruguay llevará adelante dos proyectos que se financiarán a través de una propuesta global respaldada por el Bezos Earth Fund y el Global Methane Hub. Más de 50 centros de investigación, de más de 25 países formarán parte de esta iniciativa, que contará con un presupuesto total de 27.4 millones de dólares y contribuirá a identificar y ampliar la ganadería climáticamente eficiente en el mundo.
El proyecto forma parte del programa Global Methane Genetics, una colaboración mundial que busca que la disminución de emisión de metano sea un componente estándar en la mejora genética del ganado. Entre sus cometidos, se evaluarán a más de 100 mil animales entre todos los países, se recopilarán datos sobre las emisiones de metano y se integrarán los resultados en los programas de mejora para generar beneficios climáticos a largo plazo y de bajo costo.
“Esta iniciativa es una piedra angular de un esfuerzo global más amplio para acelerar la investigación de bien público sobre el metano entérico. Junto con el Bezos Earth Fund, como parte del Enteric Fermentation R&D Accelerator, estamos construyendo una base abierta y coordinada que abarca países, razas y especies, y brindando soluciones prácticas que reducen las emisiones y apoyan a los ganaderos de todo el mundo”, dijo Hayden Montgomery, director del Programa de Agricultura del Global Methane Hub.
En este contexto, INIA liderará un proyecto sobre bovinos de carne en Latinoamérica, junto con Brasil, Argentina y México; y será socio en un proyecto sobre ovinos, liderado por Australia, junto con Irlanda, Nueva Zelanda y Reino Unido. Ambos se extenderán hasta por cinco años, para las cuales se están buscando socios uruguayos en la financiación de la contraparte país.
La línea de trabajo en ganadería bovina permitirá registrar aproximadamente 7,000 animales, 2,000 de ellos de la raza Hereford en Uruguay, y tendrá como principal beneficio para los cabañeros y productores comerciales la posibilidad de disponer de indicadores genéticos (diferencia esperada de progenie – DEP) vinculados a metano para elegir los animales que emiten menos.
El instituto uruguayo cuenta con una década de trabajo conjunto con la Sociedad de Criadores de Hereford en materia de consumo y eficiencia de conversión de alimentos, con base en la Central de Pruebas de Kiyú. En los últimos años, gracias a proyectos financiados por INIA, se añadieron los registros de emisiones de metano, comenzando el desarrollo de una población de referencia para este rasgo.