Agencias. Unilever informó que vendió su negocio de helados Ben & Jerry's en Israel a su licenciatario local por una suma no revelada, con el objetivo de suavizar un conflicto diplomático potencialmente perjudicial.
El acuerdo se produce después de que la marca de helados estadounidense anunciara el año pasado que dejaría de comercializar productos en los territorios palestinos ocupados, alegando que vender allí era “incoherente” con sus valores.
Israel condenó la medida como “moralmente incorrecta” y dijo que Unilever se enfrentaría a “graves consecuencias”. La compañía de bienes de consumo defendió la autonomía de Ben & Jerry’s, pero dijo que estaba plenamente comprometido con Israel y que encontraría una solución para finales de este año.
En virtud del nuevo acuerdo, acogido con satisfacción por Israel, los helados de Ben & Jerry's estarán disponibles para todos los consumidores de Israel y Cisjordania ocupada.
El nuevo propietario es el antiguo licenciatario israelí de la marca de helados, Avi Zinger, propietario de American Quality Products. Zinger había demandado a Ben & Jerry's tras su decisión en Cisjordania, alegando que la empresa había cortado ilegalmente su relación de 34 años.
“El nuevo acuerdo significa que Ben & Jerry's se venderá con sus nombres en hebreo y árabe en todo Israel y Cisjordania bajo la plena propiedad de su actual licenciatario”, dijo Unilever.
Al respecto, Israel dijo que acogía con beneplácito la decisión y la calificó como una “importante victoria moral contra la discriminación y el antisemitismo que se encuentra en el corazón de la campaña del movimiento Boicot de Sanciones de Desinversión (BDS)”.
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