Comunicado. Con base en un informe de Markets and Markets, se estima que el mercado de alternativas lácteas alcanzará los 27 mil mdd en 2023 y se prevé que alcance los 43,600 mdd en 2028, con una tasa compuesta anual del 10.1% entre 2023 y 2028.
El documento señala que las alternativas lácteas de origen vegetal ofrecen una variedad de beneficios nutricionales que las convierten en una opción popular para las personas que buscan una alternativa más saludable y sostenible a los productos lácteos tradicionales. El consumo de alternativas lácteas de origen vegetal ha aumentado debido a sus ventajas nutricionales, que incluyen niveles reducidos de colesterol, mayor bienestar cardiovascular y mejor control de la diabetes. Numerosos sustitutos de la leche de origen vegetal, incluida la leche de soya, la leche de almendras, la leche de avena y la leche de arroz, cuentan con un contenido de grasa y calorías más bajo en comparación con la leche de vaca.
Y agrega que la prevalencia de intolerancia y alergias a los lácteos ha estimulado la exploración de alternativas sin lácteos. Estas alternativas sirven como remedio para quienes padecen molestias digestivas o reacciones adversas tras el consumo de productos lácteos tradicionales. Los sustitutos de la leche de origen vegetal, como la leche de almendras y la leche de coco, han ganado popularidad por proporcionar una alternativa nutritiva y fácilmente digerible para personas con sensibilidades. Se están desarrollando cada vez más alternativas lácteas para ofrecer no solo una nutrición básica sino también beneficios funcionales. Estos productos suelen estar enriquecidos con nutrientes esenciales, incluidas vitaminas, minerales y antioxidantes, para respaldar el bienestar general.
El informe indica que los consumidores se sienten atraídos por alternativas lácteas que ofrecen ventajas funcionales específicas. En respuesta a la creciente demanda de opciones libres de alérgenos, el mercado de alternativas lácteas ha diversificado su oferta para satisfacer diversas necesidades dietéticas. Esta tendencia es relevante para las personas con alergias a las nueces, dado que muchas alternativas lácteas tradicionales se basan en nueces. Los fabricantes ahora están introduciendo opciones derivadas de semillas, cereales y legumbres, garantizando alternativas para quienes padecen alergias a las nueces y manteniendo al mismo tiempo el valor nutricional. La innovación culinaria y la exploración de sabores también han ganado importancia. Los consumidores ya no se contentan con alternativas sencillas y sin sabor.
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